No son feas, son engañosamente placenteras, si no fuera así, sólo las probaríamos una vez
– Para ser adicto hay que habituar al cuerpo, cada persona tarda distinto en habituarse
Las cosas feas vienen después, cuando abusamos, y nuestro cuerpo está habituado a consumir:
– Accidentes
– Hospitales
– Cárcel
– Tiempo perdido
– Olvido de nuestra propia vida
– Imprudencia
– Baja autoestima
– Abandono interno y externo
– Fracaso personal
– VIDA DESPERDICIADA