Cuando una persona es adicta, su modo de sentir, de pensar y de comportarse está completamente alterado, necesita de la droga para establecer un equilibrio en su cuerpo y en su personalidad, esto hace que el uso de la droga llegue a ser tan importante para el adicto como la vida misma. El centro instintivo de su cerebro le pide alivio y hace que vea la droga como algo imprescindible para sobrevivir.
Está convencido de que responder a una necesidad tan básica para él es algo normal, racional y lógico. Su memoria eufórica y las lagunas mentales contribuyen a bloquear en su conciencia y en su memoria lo negativo del consumo de la droga.
Sin embargo los que estamos observando la conducta del adicto, lo vemos progresivamente más enfermo, irresponsable, e irracional.
El síntoma mental más importante en el adicto es la negación, niega totalmente la realidad de su problema. El uso de los mecanismos de defensa inconscientes, apoyados por emociones alteradas y daños de la memoria, hace que se autoengañe frecuentemente. Ve a los que le rodean como a los responsables de su uso de la droga, y de las consecuencias adversas que está sufriendo. No ve que la causa de sus problemas es su adicción. Entonces no percibe claramente la necesidad de consumir la droga, o de entrar en tratamiento. Cuando se le sugiere que busque ayuda, no quiere.
Incluso en etapas más avanzadas, cuando la negación está destruida y el adicto llega a reconocer su enfermedad, es incapaz de salir de lo que le parece un callejón sin salida. Cuando se le sugiere que busque ayuda, no sabe cómo o donde encontrarla y, lo que es peor, siente que no puede. En ambos casos hace falta que se le socorra con una intervención.
Es preferible que esta se realice en etapas tempranas de la enfermedad, porque a pesar de estar vigente la negación, el adicto sigue funcionando más o menos normalmente. Tenemos que recordar que esta es una enfermedad primaria, progresiva, crónica, y hasta fatal, en el caso de que la persona no reciba la ayuda necesaria a tiempo, por lo que, mientras más temprano se realice la intervención, mejor.