Es necesario, ahora, explorar todas las cosas que el adicto podría usar como excusas para no entrar en tratamiento inmediatamente. El grupo tiene que encontrar soluciones para cada una de ellas. El propósito es cerrarle todo tipo de escape. Por ejemplo, si es una mujer adicta con hijos, alguien de confianza se compromete de antemano a cuidar de los niños mientras que esté bajo tratamiento.
Entonces, cuando presente esta excusa, la persona estará preparada para informarle que ya está todo arreglado respecto al cuidado de los niños.
Si es alguien con trabajo, algunos se comprometen a resolver el problema hablando con el empleador, o cubriendo por él, o como sea.
Que cuando se presente una excusa ya esté todo resuelto. Lo primordial es no permitirle ni una sola vía de escape.